Las IA generativas han sacudido a todas las industrias con más preguntas que respuestas. Sin embargo, a nivel educativo las preocupaciones son mayores cuando hablamos de como estás nuevas herramientas pueden afectar el proceso de aprendizaje, desde el hecho de que pueden estimular las trampas hasta evitar a los estudiantes el esfuerzo mínimo para realizar ensayos. El ChatGPT en las escuelas ha avivado el miedo a un desastre, ¿pero realmente lo es? ¿cómo esta cambiando el sistema educativo moderno?
Pero no todos ven a ChatGPT como un enemigo, más bien puede ser una herramienta muy útil que puede ayudar a los estudiantes a mejorar su proceso de estudio e incluso mostrar deficiencias en los sistemas de educación actual.
En este artículo exploramos algunas inquietudes de las herramientas como ChatGPT en las escuelas desde el proceso de aprendizaje hasta como puede mejorar los procesos administrativos.
La llegada ChatGPT en las escuelas
Cuando Kelly Gibson se encontró con ChatGPT por primera vez en diciembre, una sensación de ansiedad se apoderó rápidamente de ella. Esto debido al hecho de que ella es profesora de inglés en una escuela secundaria en los Estados Unidos. Mientras que Internet se deleitaba con las respuestas aparentemente sofisticadas del chatbot, a muchos educadores no les resultaba gracioso en absoluto.
Surgió una preocupación significativa: si cualquiera pudiera pedirle a esta tecnología que escribiera 300 palabras sobre el simbolismo de la luz verde en “El Gran Gatsby”, ¿qué impediría a los estudiantes usarla para hacer trampa en sus tareas escolares?
Esto generó una inquietud generalizada y se especuló sobre la posibilidad de una nueva era de trampas desenfrenadas, la desaparición de los ensayos y, en última instancia, la amenaza para la educación en sí misma. Gibson expresó sus pensamientos al respecto, señalando: “Pensé, ‘Esto es literalmente lo que yo enseño'”.
ChatGPT en las escuelas una oportunidad para el aprendizaje
Sin embargo, en medio de este pánico, algunos profesores entusiastas comenzaron a ver en ChatGPT en las escuelas una oportunidad para rediseñar el aprendizaje que podría dar forma al futuro de las aulas. Gibson se unió a este grupo. Una vez que superó su preocupación inicial, decidió probar la herramienta durante las vacaciones de invierno y buscar formas de incorporarla a sus clases.
Por ejemplo, considera la posibilidad de que los alumnos generen un texto con el bot y luego lo editen ellos mismos para detectar errores o mejorar su estilo de escritura. Gibson, con 25 años de experiencia en la enseñanza, compara esta idea con otras herramientas tecnológicas conocidas que mejoran el aprendizaje y el pensamiento crítico. Ella afirma: “Aún no sé cómo hacerlo de manera efectiva, pero quiero que los chatbots de inteligencia artificial sean como calculadoras para la escritura”.
¿Es ChatGPT una amenaza para la educación?
La opinión de Gibson de que ChatGPT puede ser una herramienta educativa en lugar de un medio para hacer trampa, como algunos temen, destaca un punto fundamental. Este bot no posee la inteligencia humana a pesar de su capacidad para producir texto similar al creado por personas. Es esencialmente una máquina estadística que puede generar conceptos o incluso información falsa y, en ocasiones, requiere orientación y edición adicional para producir un trabajo de calidad.
A pesar de estas limitaciones, Gibson, que enseña en una zona predominantemente rural y de bajos ingresos en Oregón, siente que tiene la responsabilidad de llevar ChatGPT a sus aulas. Argumenta que si solo los estudiantes con acceso inmediato a dispositivos conectados a Internet pueden aprender a utilizar el bot, la brecha digital podría ampliarse aún más y perjudicar a aquellos que no tienen acceso a tales recursos en sus hogares. Por lo tanto, Gibson ve la posibilidad de convertir a ChatGPT en una oportunidad de enseñanza para todos sus estudiantes dentro de la escuela.
Otros educadores que rechazan la idea de un desastre educativo plantean que ChatGPT no está destruyendo la educación, sino más bien llamando la atención sobre cómo el sistema actual no funciona correctamente. Alex Taylor, investigador y profesor de interacción persona-computadora en la City University de Londres, sugiere que el bot ha generado debates entre sus colegas sobre el futuro de los exámenes y la evaluación. Si un chatbot puede responder a una serie de preguntas de un examen, ¿realmente refleja ese examen el aprendizaje valioso? Taylor sostiene que las preguntas repetitivas que el bot puede responder no fomentan el tipo de aprendizaje que debería ser el objetivo principal de la educación.
¿Cómo utilizar ChatGPT en las escuelas?
Olya Kudina, profesora en la Universidad Tecnológica de Delft en los Países Bajos, utilizó ChatGPT en su clase como una herramienta para llevar a cabo un debate entre sus alumnos. Los grupos de estudiantes presentaron argumentos y contraargumentos sin la ayuda del chatbot, respaldados por referencias académicas. Luego, dieron la misma tarea a ChatGPT y compararon su respuesta con sus propios textos. Los estudiantes se sorprendieron por la rapidez con la que el chatbot generaba un texto coherente, pero al analizarlo con más detalle, descubrieron que la herramienta proporcionaba datos falsos y tenía razonamientos vagos e ilógicos. Llegaron a la conclusión de que copiar las respuestas de ChatGPT no les ayudaría a obtener buenas calificaciones.
Kudina argumenta que los profesores no deberían prohibir el uso de ChatGPT ni adoptar la tecnología de manera acrítica. En cambio, aboga por que los educadores adopten la tecnología de manera crítica y encuentren formas creativas de colaborar con ella. Por ejemplo, los alumnos podrían usar el chatbot para generar nuevas ideas o argumentos. Además, cree que esta herramienta podría motivar a los educadores a diseñar tareas basadas en las experiencias personales de los estudiantes, algo que ChatGPT no puede hacer con sus datos de entrenamiento.
Desafíos de utilizar las IA generativas
Sin embargo, es importante destacar que ChatGPT también plantea desafíos en la educación. Surgió en un momento en el que muchos profesores están agotados después del aprendizaje a distancia de emergencia durante la pandemia, y ahora enfrentan la amenaza de tener que adaptarse a otra tecnología que podría aumentar su carga de trabajo. Además, las implicaciones de privacidad de los estudiantes no están claras, especialmente en los niveles de primaria y secundaria. OpenAI recopila datos de usuario y revisa las conversaciones con ChatGPT, aunque las condiciones del servicio recomiendan su uso solo para mayores de 18 años, y el bot no verifica la edad.
Prohibir por completo el uso de ChatGPT en las aulas, aunque pueda ser tentador, podría generar nuevos problemas. Torrey Trust, profesor asociado en la Universidad de Massachusetts Amherst, señala que volver a métodos analógicos de evaluación, como los exámenes orales, podría perjudicar a los estudiantes con discapacidades. Además, la prohibición total de herramientas de inteligencia artificial podría crear un ambiente de desconfianza en el aula. Trust comenta: “Será más difícil que los alumnos aprendan en un entorno en el que un instructor trata de atraparlos haciendo trampa. Esto cambia el enfoque del aprendizaje hacia obtener una buena calificación”.
En enero, al comienzo del nuevo semestre,
las escuelas públicas de la ciudad de Nueva York prohibieron el uso de ChatGPT en dispositivos y redes escolares debido a preocupaciones sobre sus efectos negativos en el aprendizaje y la seguridad de los contenidos. Marilyn Ramírez, profesora de inglés en una escuela secundaria en Washington Heights, ve a ChatGPT de manera similar a cómo permite que sus alumnos utilicen Google Translate para aprender el idioma. Lo considera beneficioso bajo la orientación de un instructor, pero reconoce sus limitaciones.
Cuando Gibson regresó a la escuela en Oregon para el nuevo semestre, sus planes de presentar ChatGPT a sus alumnos se vieron frustrados debido a la prohibición de la herramienta en la red educativa. En su lugar, mostró la herramienta a su clase de literatura utilizando capturas de pantalla. Su enfoque actual implica que los estudiantes utilicen ChatGPT para generar redacciones basadas en tesis originales, y luego analicen y mejoren el texto generado por el bot como un ejercicio para desarrollar habilidades críticas de análisis y escritura.
Gibson se muestra esperanzada, pero también reconoce que la tecnología aún está en una fase inicial y su papel en la educación está por definirse. En última instancia, considera que será responsabilidad de los profesores resolver cómo incorporar de manera efectiva ChatGPT en el proceso educativo. En el momento de escribir esto, sus alumnos habían presentado su primera ronda de ensayos utilizando esta inteligencia artificial en casa sin consecuencias significativas. Ella sigue haciendo un esfuerzo para que su escuela permita a los estudiantes acceder a ChatGPT.
Automatización para mejorar el proceso educativo
Otro aspecto donde la tecnología puede ayudar en el proceso educativo es mejorando la parte administrativa. Las tareas cómo el trámite de reinscripción o la renovación de becas provocan que los alumnos pierdan tiempo que podría utilizar de forma más productiva. Por otro lado, los profesores pueden ahorrar tiempo en labores como la calificación de exámenes o cargar las calificaciones a un sistema.
Al utilizar soluciones de software para realizar las tareas repetitivas, no sólo se reduce la tasa de errores, también disminuye el tiempo necesario para ejecutarlas. Además, se tiene la ventaja de que los procesos pueden continuar sin interrupción durante las 24 horas del día. Esto, a largo plazo, representa ahorros sustanciales en los costos de operación de las universidades.
Las herramientas de AutomationEdge RPA cuentan con diferentes características para respaldar a las escuelas, ya sean de educación media o de nivel superior. AutomationEdge ayuda a los estudiantes y los maestros ayuda a encontrar soluciones rápidas a sus muchas preguntas. Ayuda a las universidades a operar con recursos limitados sus tareas de administración.
También te puede interesar: RPA en la educación, qué es y cómo está cambiando la industria
AutomationEdge para cambiar las instituciones educativas
Las instituciones educativas están avanzando hacia la automatización, lo que es traerá beneficios para todo el personal, los administradores y a los estudiantes para sus diversas actividades educativas. RPA puede reducir drásticamente la dependencia humana para las tareas mundanas y aumentar la productividad con un tiempo reducido.
AutomationEdge e HIXSA ya están en el camino hacia un servicio automatizado productivo y altamente inteligente para las empresas a través de la hiperautomatización. Solicita una demostración hoy mismo y comprueba que AutomationEdge es un producto de automatización de procesos robóticos inteligentes incluye tecnologías esenciales para la automatización de front office, middle office, back office y las operaciones de TI.
Consulta la información original.
